El realismo se impone cuando vemos gente afectada por el peso de la edad, con independencia del estado de ánimo o de las acciones con que hayan sido representados.

Por la intensa llegada de visitantes locales que buscan la frescura de la playa, y de los turistas que llegan con los cruceros a Progreso, se está remodelando el centro. Eso incluye decorar muros blancos con grafiti y arte.

En los grafitis se ven muchas variaciones sobre la naturaleza, unos muy realistas y la mayoría con el mensaje de conservarla y cuidarla porque somos parte de ella y de su cuidado depende nuestro futuro.

En esta región se abusa de la palabra “maya”, aunque los mayas no sean respetados siempre. Además, se proyecta una imagen folclórica, de los tiempos prehispánicos y la etnia maya, para consumo turístico, con una reiteración de íconos estereotipados.

Un mundo loco, al revés o todo lo opuesto. Figuras distorsionadas, en poses inverosímiles, a veces con bocas demasiado abiertas. Seres creados como provenientes de viajes siderales y en actitud retadora, en contraste con la apacibilidad de los que pertenecen al reino de los dibujos animados.

Murales coloridos, con figuras donde se remarca la tercera dimensión, en algún lugar con trampantojo o con otros efectos visuales. Las figuras pueden deformarse en alguna parte hasta llegar a formas indefinidas.

Los códigos de grupos juveniles se pueden ver en muchos lugares del mundo, con características muy similares en los llamados tags. Una especial expresión caligráfica que en apariencia traspasa fronteras nacionales e idiomáticas, pero que conlleva también otros significados comprensibles para generaciones jóvenes.