Parece haber tres formas de comercializar las alhajas tradicionales de oro y plata en los distintos lugares del estado: Mérida, Valladolid y el resto de las poblaciones rurales. Describiremos cada forma.
Desde la época en que se cerraron los grandes talleres, la comercialización quedo controlada por los comerciantes que tienen sus locales en el mercado y en el centro. Ellos captan el mercado local, el turismo y el nacional. Tienen agentes que llevan las alhajas tradicionales a jalisco, tabasco, guerrero, distrito federal, etc.…
Dichos comerciantes controlan la entrega de productos a través del sistema de maquila. En este sistema el comerciante es el dueño de la materia prima, por lo tanto, entrega la cantidad que quiere al artesano y pide determinado número de alhajas, cuyo diseño él determina. Al entregar el trabajo, el comerciante paga la mano de obra y entrega más material para ser trabajado.
Bajo este sistema, la comercialización realmente se inicia en el momento en el que el comerciante exhibe sus piezas para venderlas al comprador que llega a su tienda, o en el momento en que las distribuye a otros comerciantes de distintas partes de la república, a través de sus agentes.
Antes, el productor vendía su mercancía al comerciante que más le convenía; en cambio ahora, el dueño de la mercancía es el comerciante, ya que es el dueño de la materia prima, y como tal, determina lo que se produce, el tiempo, la cantidad de productos y el tipo de ellos. Aunque el productor sea el dueño de los medios de trabajo, no tiene control sobre el proceso productivo.
El resultado es que el artesano deja de ser productor independiente y pasa a hacer un asalariado del comerciante, que es el verdadero patrón. Solo que conservando su condición de artesano.
Hay otros artesanos, los menos, que sí se han mantenido más o menos independientes. Son los que trabajan la plata. Ellos venden su mercancía a algunos comerciantes o a las tiendas del gobierno: La casa de las artesanías, del gobierno estatal y el Museo de Arte Popular, del gobierno federal. Estos productores realizan esporádicamente trabajos de maquila en oro y también se dedican a hacer reparaciones. Su número es limitado porque no hay mercado amplio para la plata. A nivel local, la gente no gusta consumir plata porque como el ambiente la ennegrece rápidamente, no se ha consolidado dicha tradición. A nivel nacional, tiene mucha más demanda la platería que se fabrica en lugares como Taxco, cuyos diseños son modernos y cuyos precios son más baratos porque la filigrana, que es lo que se trabaja en plata, lleva mucho más trabajo y es muy difícil competir en esas circunstancias.
El sistema de maquila y el tipo de comercialización, ha dado lugar a la siguiente estructura:
Comerciantes-maquiladores. Constituyen la mayoría de los dueños de locales y tiendas que hay en el mercado y Centro de Mérida. Entregan material para maquillar, tanto a productores que hacen pulsería moderna, como a los que trabajan la joyería tradicional. Venden en sus tiendas y tienen agentes que distribuyen en otras partes del país.
Fabricantes-comerciantes-maquiladores:
Son algunos dentro del grupo de los comerciantes, que además de tener sus locales de venta en el centro de Mérida y en el mercado, tienen talleres en donde se fabrica joyería moderna trabajada con maquinaria que trabajan obreros. Han sido talleres clandestinos que evaden impuestos y que no pagan seguro social. imponen horarios escalonados a sus trabajadores a fin de que no se note que son centros de trabajo y, generalmente, están atrás de las casas de los patrones. Este sector también obtiene sus productos tradicionales de productores que no trabajan en sus talleres, a quienes dan material para ser maquilado. Venden en sus tiendas y distribuyen alhajas en otras partes del país.
Este sector está compuesto básicamente por comerciantes, pues solo tres o cuatro de ellos, se iniciaron como plateros y conocen el oficio.
Productores-maquiladores. Son los que trabajan maquilando para algún comerciante. Este sector está dividido según el criterio que se adopte. Desde el punto de vista del trabajo que realizan hay: Filigranistas; Escarchistas; Cadeneros; Esmaltistas.
Entre estos, algunos trabajan solos y ellos elaboran todo. Otros, cuando tienen más trabajo, recurren a otras personas a que los ayuden. Hay otros que siempre tienen exceso de trabajo y tienen empleados o familiares que les ayudan. Generalmente maquilan para cierto comerciante, pero pueden vender su trabajo a varios.
Productores independientes. Estos productores son los que hacen trabajos de plata. A veces también maquilan para los comerciantes. También se dedican a hacer composturas. Son la minoría de los productores.
Plateros operarios. Son los trabajadores que trabajan en algún taller para otro, ya sea un fabricante o para un platero maquilador. Son la mayoría de los plateros.
En Valladolid el mercado más importante lo constituyen los campesinos. Pero también hay algunos comerciantes que venden en otros lugares como Quintana Roo, Campeche, Tabasco, e incluso, en Belice. Como en Mérida, también se ha introducido el sistema de maquila, lo que ha permitido la continuación del oficio, pero a diferencia de Mérida, los maquiladores son plateros y aunque ahora estén dedicados principalmente a la comercialización, conocen el oficio. En Valladolid los sectores que conforman la producción de platería tradicional son los siguientes:
Mayoristas. Les llaman así a los comerciantes que pagan maquila a otros productores, y que tienen agentes que les venden en otras partes que no son Valladolid. Además de la distribución a través de agentes, venden en el lugar donde tienen su taller. En Valladolid había, en 1978 dos mayoristas. Uno de ellos también tenía empleados en su taller y él producía; en cambio el otro se dedica a composturas, y deja la producción a los que les paga la maquila.
Viajeros. Se llama viajeros a los plateros que salen a vender y a recoger pedidos y alhajas para la reparación. Salen a los pueblos de los alrededores de Valladolid, van a Tizimín y a los puertos. La producción que llevan a vender es hecha, principalmente, por artesanos a los que les dan a maquilar. Ellos tienen sus talleres, pero se dedican a reparar más que a producir.
Plateros independientes. Son los que tienen taller propio con empleados. Ellos mismos comercializan sus productos, exhibiendo piezas en los sitios donde tienen sus talleres o en alguna pequeña tienda.
Plateros maquiladores. Son productores que trabajan principalmente para los mayoristas y viajeros. Ellos también tienen taller y hacen los encargos que se les hace directamente, aunque esporádicamente. También se dedican a hacer reparaciones.
Plateros empleados. Son los que trabajan para otro taller, ya sea de mayoristas, de plateros independientes o de plateros maquiladores. No tienen taller.
En otros lugares donde hay talleres, la demanda de lo tradicional está formada solo por campesinas de la región. Estas solamente compran alhajas en ciertas temporadas: cuando hay venta de cosecha o en la época de las fiestas, sobre todo en diciembre. También cuando son las fiestas. En otras temporadas, se dedican a hacer reparaciones. A veces van a trabajar a Mérida en algunos talleres donde solicitan más personal. Por ejemplo, cuando es fin del año escolar, hay dos o tres fabricantes de Mérida que hacen anillos de graduación y que ocupan más personal. Por ejemplo, cuando es fin del año escolar, hay dos o tres fabricantes de Mérida que hacen anillos de graduación y que ocupan más personal de lo normal. En ese tiempo hay gentes de Peto, de Valladolid, de Maxcanú y otras poblaciones, que van a trabajar para esos grandes fabricantes de Mérida. Los sectores que encontramos relacionados con el trabajo de platería son los siguientes:
Plateros con empleados. La minoría de los plateros que hay en los pueblos tienen empleados. Solo encontramos en Peto. Motul. Tekax. Se dedican tanto a la producción como a la reparación de alhajas.
Plateros independientes. Tienen un pequeño taller en donde, sobre todo, se dedican a reparaciones. Esporádicamente producen alhajas, y circunstancialmente les ayuda a alguien de la familia que sabe hacer algún trabajo. La mayoría de los plateros de los poblados se encuentran en esta situación.
Plateros empleados. Son los que trabajan para otro taller. Ellos mismos no tienen taller. Generalmente son muy jóvenes y están aprendiendo el oficio.