Los dioses balames – yuum balamo’ob – han sido creados por Dios para cuidar los pueblos de todo el mundo. En las cuatro entradas de un pueblo hay uno de guardia.
Balam significa ‘jaguar’, pero en Xocén se los imaginan como hombrecillos con piernas peludas y barbas largas. La gente no los puede ver; pero en las milpas se escuchan sus chiflidos.
Para llevar una buena relación con ellos, cada tres años, al entrar nuevo comisario, él tiene la obligación de organizar un loj kaj, para los balames que cuidan el pueblo. Implica brindar una ofrenda de comida con carne de pollo, hostias de maíz, vino de balché y sacá. Estuve presente en 1999. El 7 de mayo, 2023 lo hicieron, pero sin mi presencia.