Comisario, sargentos y soldados

El comisario es el responsable de organizar la ceremonia de la petición de la lluvia. Se pone de acuerdo con los sargentos, quienes son las personas que controlan los grupos de ‘soldados’ en Xocén, los cuales se organizan para realizar cada una de las actividades de la ceremonia.

La celebración de la ceremonia no tiene fecha fija, sin embargo, siempre se busca que inicie un viernes para terminar en domingo, esto es por las personas que trabajan lejos y sólo llegan los fines de semana. Generalmente la ceremonia se lleva a cabo en el mes de junio. Esto porque para este mes todos los milperos están ansiosos de iniciar la siembra, si es que no lo han hecho ya con aguaceros adelantados. Pero las fechas pueden variar, los milperos son flexibles y prácticos.

En 1981, la ceremonia se hizo a mediados del mes de junio. En 1989, la ceremonia tuvo lugar el domingo 21 de mayo. Se efectuó en una fecha adelantada por que había habido, una época con mucha sequía.

En 1990 se llevó a cabo a mediados del mes de junio. En 1999 se atrasó hasta fines de agosto. Como este año cayeron buenas lluvias en mayo y junio, la gente no sentió la urgencia de celebrar la ceremonia. Además, en julio, muchos hombres estaban trabajando fuera de Xocén para ahorrar dinero para la fiesta del pueblo en honor al Cristo de la Transfiguración, que se verifica cada año durante los últimos días de julio y principios de agosto. Por eso la ceremonia se hizo hasta fines de agosto.

Los soldados son todos los hombres de Xocén entre 15 y 18 años y de 50 a 60 años de edad. Están organizados en grupos bajo las órdenes de un sargento y cada tres o cuatro meses deben hacer servicio público como policías, guardias, enterradores etcétera, en el palacio comisarial de Xocén. Sólo están exentos los hombres que han servido en cargos mayores como el de comisario.

Los trabajos de los soldados son:

• Recoger el agua de los cenotes que se encuentran dentro del ejido, pero sobre todo el de Ch’och’olá. Esta agua es la que sirve principalmente para preparar el báalché.
• Limpiar el espacio donde se hace la ceremonia.
• Buscar los palos que sirven para construir los altares.
• Traer las ramas y demás hojas para formar los arcos.
• Juntar la leña para calentar el horno del pib y escarbar el horno.

Los J’meno’ob

Al ser el  Ch’a’ Cháak la ceremonia más grande de la comunidad, participan tres j’meno’ob, porque hay que realizar la rogación en tres altares al mismo tiempo.

Entonces este pobre j’men, cuando empieza a hacer la ceremonia del Ch’a Cháak no sólo pide lluvia sobre Xocén, sino pide la bendición de Nuestro Señor para todo el mundo… digo, de la península. Siempre se ve que se levantan grandes nubes, y así logramos nuestras cosechas. Si no hacemos la ceremonia perdemos las cosechas. (Fermín Dzib, 1981).

Tsíits Ja’

El tsíits ja’ es el “sacristán” de los j’men’ob, quien los ayuda durante toda la ceremonia.

Los campesinos del pueblo de Xocén

En Xocén, la ceremonia de Ch’a’ Cháak es asunto y responsabilidad de todos los campesinos del pueblo. En 1989, vimos más de 80 participantes, aunque en 1999 solamente participaron unas 50 personas, en su mayoría, personas de edad o niños. Muchos jóvenes ya salen a trabajar a la costa del Caribe y, últimamente, también a las maquiladores que han empezado a funcionar en Valladolid.